El Golpe Militar que destruyó la Industria Nacional

martes, 20 de octubre de 2009

Nach One

Miguel Angel Bravo: Arquitecto porteño y empresario de la industria plástica diseñó hace poco más de un año un deportivo compacto con motor trasero y, unos meses después, expuso el primer concept en escala real en el Salón de Buenos Aires. En las últimas semanas, el primer auto de Bravo Motor Company aceleró de manera sorprendente: un grupo de inversores independientes ya aportó el dinero necesario para crear, antes de fin de año, el primer prototipo que funcione.

En su taller de Paternal, Bravo trabaja a toda hora sin parar. Un grupo de doce colaboradores intenta seguirle el ritmo. Me muestra renders, maquetas, videos en tres dimensiones, habla de normativas de seguridad, de las acciones que ya vendió la compañía, de un segundo auto más urbano y también de Star Wars.

Prototipo Argentino Nach One 2.0

Bravo avanza con tanta rapidez en su proyecto que el concept que exhibió en La Rural hace menos de un año hoy junta tierra en el fondo del taller. Ya no le gusta. Dice que esa maqueta es desproporcionada, “culona”. Y que el auto de producción será mucho mejor.

Su desvelo en este momento es el Nach One 2.0, la versión definitiva de su deportivo descapotable para tres personas, cuyas primeras imágenes reservó para que se publiquen en exclusiva en Argentina Auto Blog.

En el One 2.0 con butaca multimedia, el volante es una especie de avión caza con ruedas: el conductor va ubicado adelante y en el centro, con los dos pasajeros atrás y a los costados.-

El 2.0 de su nombre no se refiere a la cilindrada del motor, sino al carácter participativo del proyecto: Yo no entiendo a las terminales automotrices que esconden sus nuevos productos como si fueran secretos de la Nasa, dice Bravo. Yo mostré al Nach desde el primer día porque quería que todo el mundo opinara, lo pateara y lo criticara. Así lo fui mejorando. Aprendí muchísimo de los comentarios de los lectores del primer post que publicó Argentina Auto Blog y de muchos foros donde lo publiqué, como Tuning-On.

La financiación para construir el primer prototipo también salió de una comunidad virtual: en el Club Rich Dad ya se vendieron 900 acciones de la compañía, que fueron aumentando su valor hasta cotizar hoy en 500 dólares cada una.

El chasis de aluminio fue diseñado con el asesoramiento de todo un experto: el genial Pedro Campo, quien también aportó sus ideas para mejorar la distribución de masas.

La carrocería será de polietileno. Es el mismo material de las bolsas de residuos, pero con la dureza que este plástico adquiere cuando se lo utiliza, por ejemplo, para construir los juegos y laberintos infantiles que produce otra empresa propiedad de Bravo. “Esto no es un invento mío”, aclara Miguel. “Ya hay otros autos así, como el Ford Think. El polietileno es reciclable por completo porque se derrite y se reutiliza. Es diez veces más resistente que la chapa de cualquier auto”, explica mientras golpea contra un panel como un barrabrava con barreta hierro. También es más liviano y más fácil de moldear. Además, a diferencia del poliuretano, no se prende fuego. La cúpula traslúcida descapotable será de policarbonato, mientras que el parabrisas tendrá un vidrio laminado reglamentario.

Con motor trasero y tracción trasera será un auto que necesitará un gran apoyo aerodinámico: habrá un alerón retráctil en la cola y un spoiler delantero como en un Fórmula 1, que estará construido en goma para aprobar las normativas internacionales de protección a peatones.

Fue él, Nacho, el hijo de Bravo, la excusa perfecta para que se pusiera en marcha este deportivo argentino.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que buena noticia, no teniea idea que habia gente tan aspirante, en buenos aires, y perserverantes con los autos. saludos. gracia por compartir la informacion.

Anónimo dijo...

Ojalá, lleguemos a producir un automovil, o camioneta puramente argentino. Ojalá esto dará laburo a muchos argentinos.-